Esta es una modificación de una receta de garbanzos con setas que mi padre encontró en un libro de cocina leonesa y que le encanta hacer (y le sale muy bien). Da para cuatro o cinco raciones.
Ingredientes:
Ingredientes:
- 500 gramos de níscalos
- 300 gramos de alubias blancas pequeñas
- seis dientes grandes de ajo
- pimentón picante
- perejil
- sal
- aceite de oliva virgen extra
Elaboración:
Poner las alubias a remojo la noche anterior. Cuando nos levantemos, desechamos el agua y las ponemos a cocer y cuando hierva bajamos el fuego, de manera que se vayan cociendo poco a poco.
En una sartén con el fondo de aceite, echamos los dientes de ajo bien picaditos, una vez hayan blanqueado y estén empezando a dorarse, los sacamos escurriendo el aceite, los echamos en un mortero, añadimos un puñado de perejil, machacamos y lo mezclamos todo bien. En esa misma sartén añadimos los níscalos limpios y troceados, dejamos que se vayan haciendo y cuando hayan soltado el agua y estén cocinados echamos una cucharadita de pimentón picante, la mezcla de ajo y perejil y un vasito de agua. Dejamos a fuego fuerte unos cinco minutos y lo añadimos a las alubias.
En la receta original ponía que con cinco minutos de cocción conjunta ya se comía, pero a mí me gusta dejar al menos media hora todo para que se mezclen bien los sabores.
Las alubias necesitan al menos tres horas de cocción, probad y cuando estén mantecosas es cuando se pueden comer.
Observaciones:
Un plato completo que puede ser único, ideal para el otoño y el invierno (aunque con otra seta). Muy muy sabroso y de puchero de todo la vida.
Se pueden sustituir los níscalos por otro tipo de setas y las alubias por otra clase de legumbres, la original era con garbanzos, pero seguro que con cualquiera quedan bien.
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